domingo, 30 de marzo de 2008

Diálogo

"Puedo hacerte cosas
que ella no puede ni mencionar",
te dije una vez.
"La quiero", respondiste.

"Sufrimos de locura y
la disfrutamos juntos a cada momento",
repliqué después.
"La quiero", me dijiste.

"Pudemos mirarnos por horas,
y decirnos mucho más que palabras con nuestros ojos",
se me escapo.
"La quiero", respondiste.

Estás con ella.
La quieres a ella.
Estás con ella
y conmigo no.

Puede que ya no me recuerdes,
puede que me hayas dejado atrás,
pero a ella dices que la quieres
y a mí dijiste amar.

1 comentario:

Siempr3nada dijo...

siempre me gusto como escribis... y con los años q nos acompañan y la de escrituras que se nos enganchan en las piernas, intento en el silencio, cerrando los ojos y agudizando el oido, repetir ese fragmento q me aprendi de memoria...
para escuchar de nuevo en esa aula de pisos dibujados, tu voz pronunciando tu escritura...
porque nosotros sabemos, y los años nos deltan, que una escritura no es la misma que de labios de su autor... o no?

besos belen... escribamos nuevamente