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Hace un tiempo ya
que no caminamos juntos.
Sin saber bien por qué
tomaste otro camino.
Sin saber bien por qué
yo no esperé a que vuelvas.
Hace un tiempo ya
que te pienso sólo de a ratos.
Y no hago nada
por hablar con vos otra vez.
Y no hago nada
por intentarlo otra vez.
Quisiera saber que hacés
y si quisieras hablar conmigo.
Quisiera más que nada
que me invites a tomar un café.
Cómo decirte
que aún te extraño
si no sé si es cierto.
Cómo decirte
que soy la misma
si puedo reconocer mis cambios.
Cómo decirte
que vuelvas a mí
si no sé si aún sos el que amé.
Cómo decirte
que volvamos a intentarlo
si no sé como hablarlo.
Cómo decirte
que te amo
si no sé cómo amarte esta vez.
Do I need you?... Not really...
Do I think about you?... Often enough...
Do I want to talk to you?... Yes...Do I miss you?... Sometimes...
Do I think that we might work things out?... Could be...
Do I dream about you?... I did...
Do I hold on to our good moments yet?... Too much to my taste...
Do I cry at night remembering "us"?... Just during PMS...
Do I look like I'm great?... Always...
Do I want to get back together with you?... I don't know...
Do I still love you?... Not like I used to...
Que pasaría
si no tuvieramos
nada de que hablar,
si de repente los silencios
fueran más intensos
que los besos de antes.
Que pasaría
si al cruzarnos no supieramos
ni cómo saludarnos,
si caigo en la cuenta
de que pienso en alguien más.
Que pasaría
si ya pasó tu momento
y es tarde cuando quieres retomar,
si por mucho que te haya amado
ya no es suficiente
para volver a confiar.
Te has hecho de piedra
para no sentir más,
te has transformado en cal
para no ver más allá.
No sé si fue susto
lo que te ganó la partida,
no sé si fue simple cobardía
lo que te llevó a la huída.
Ahora me encuentro
en un lugar extraño,
pensando en vos
sin saber cómo sentir.
Cada vez que me entero
algo de tu vida,
ahogo una angustia
que no me tortura.
Sigo mi vida
y no sé bien qué pensás,
no querés desaparecer
pero tampoco te querés jugar.
Quiero verte, pero no.
Quiero hablarte, pero no.
Quiero mirarte, pero no.
Quiero encontrarte por casualidad, pero no.
Sé que al verte otra vez
muchas cosas pueden suceder
y quizás ninguna de ellas
vaya a terminar bien.
Quiero cruzarte, pero no.
Quiero bailar con vos, pero no.
Quiero llamarte por error, pero no.
Quiero mandarte mil mensajes, pero no.
Cualquier intento conciente o no
puede terminar en arruinar
mis intentos de olvidarte
que fueron más eficientes de lo que esperé.
Estoy aquí,
parada sin saber bien
qué decir.
No sé por qué
las palabras
han escapado de mi.
Hice cosas
que no hubiera hecho
pensé y dije tantas otras más.
No sé cómo
tanto
se transformó en incomodidad.
Hoy no estoy segura
si quiero verte otra vez
tengo miedo de lo que pueda suceder.
Quizás sea mi afán de guardar
en algún lugar
esa manera que teniamos de ser.
Quizás sea también
que no quiero sentir
la distancia que hay entre los dos.
Hola, cómo estás?
Ojalá respondas bien.
Yo aquí sentada,
al borde de la cama,
pensando en lo que fue.
Hola, cómo estás?
No te recuerdo bien.
Y cada vez que miro fotos,
no recuerdo bien,
si fue hace un año o ayer.
Hola, cómo estás?
Quisiera haber sabido de vos.
Hubiera podido contarte
un par de cosas
y quizás haber dicho adiós.
Hola, cómo estás?
Ya estamos tarde.
Me voy en unos minutos,
y ya no sé si volveré,
para pensar juntos lo que fue.
Me estoy acostumbrando
a tu ausencia repentina
y tengo miedo
de dónde pueda terminar.
No quisiera olvidarme
de cómo saben tus besos
ni de qué es lo que sentía
al sentir tus manos en mi cuerpo.
Me estoy acostumbrando
a no hablarte
a no escuchar tu voz
a no sentir tu risa.
Cómo hacer para aferrarme
a los últimos recuerdos
que me quedan contigo
cuando todo era más sencillo.
Me estoy acostumbrando
al vacío que dejaste en tu lugar
ese que ocupabas en mi vida
y cada vez se desdibuja más.
No quisiera acostumbrarme más
a no tenerte conmigo
porque sólo me quedaría olvidar
por qué sí quería estar contigo.
No puedo respirar
no con claridad
es como si el aire
estuviera viciado.
Hay un espacio
un espacio vacío
que se mantiene constante
y como inerte.
He intentado llenarlo
de maneras diversas
pero parece estar destinado
a permanecer vacío.
Pienso que es posible
que en realidad
sea yo misma
quien no permite llenarlo.
Es por eso que te espero
y ahora lo sé
no quisiera rellenar apuros
sólo porque si.
No puedo respirar
a veces no puedo
es como si los pulmones
estuvieran vacíos.
Sos mi pecado favorito,
mi vicio más exquisito
y mi mejor pretexto para ganar el cielo.
Sos mi helado preferido,
mi debilidad más divertida
y en quien puedo confiar.
Sos mis mates a la tarde,
mi cena una vez por semana
y mi viernes y sábado además.
Sos mi protagonista de ensueños,
mi desplazamiento inconsciente predilecto
y mi mejor condenzación.
Sos la primera palabra del día,
la primera imagen de mis ojos cerrados
y la única caricia que espero.
Sos mi patología preferida,
mi psicofármaco adictivo
y la más estremecedora fantasía de diván.
Sos cada uno de mis días,
mis meses y ahora años
y cada uno de mis retrazos.
Sos mi "pequeña persona",
mi corazón, mi amor, mi sonrisa
y mis mensajes diciendo "te amo".
Abrí mis ojos y te vi
estabas de pie junto a mi,
me tomaste de la mano
me miraste con tus ojitos brillantes
y me pediste que te siguiera.
Cómo decirte que no
si tu roce es tan suave
si tu voz es tan dulce
si tus ojos no miran mis ojos
sino llegan hasta mirar mi alma.
Te tomé de la mano y te seguí
y caminé tu camino
y lo caminé a tu lado
decidimos juntos en los cruces
por cuál lado continuar.
Han pasado ya
cuatrocientos ochenta y cinco días
seguimos tomados de la mano
mirándonos más allá de los ojos
sintiéndonos más allá de la piel.
Una noche lo conocí
y debo admitir
que no imaginaba
que fueras a transformarse
en lo que significa en mi vida.
Una noche lo besé
y ese beso tuvo un sabor distinto
sabía a azúcar, futuro y miel
y aunque era muy dulce para mí
quise besarlo otra vez.
Una noche lo tomé de la mano
y vi que tomaba la mía con cariño
aproximándome a él
sentí una seguridad
que no había conocido.
Una noche lo abracé
y lo sentí abrazarme también
y en ese momento supe
que podía confiar en él
que no me abandonaría.
Una noche lo extrañé
y decidí desde el principio
que nunca más quería
volver a sentirme así
sin poder dormir.
Una noche lo amé
y nunca había sentido
a mi corazón latir así
como si quisiera saltar de mi pecho
para abrigarse en el de él.
Cuando veo tu ojos
y me pierdo en su profundidad
nada puede perturbar
mi tranquilidad.
Y siento como si pudiera
frenar por un segundo
el girar de la Tierra
y yo simplemente respiro.
Sintiendo en tu pecho
el latir de tu corazón
siento que el mio
late al mismo ritmo.
Somos dos
y también uno.
Hace tiempo compartimos
más de una caricia
más de una sonrisa
más de un te quiero.
Hace tiempo que sabemos
que por muy lejos que estemos
estamos esperando
el momento del reencuentro.
Hace tiempo que estamos
caminando el mismo camino
cuidándonos, mimándonos
sin soltarnos las manos.
Ayer le conté a la Luna
que estoy enamorada
y me preguntó de quién.
Le conté que sos dulce
le conté que me cuidás
le conté cómo me siento a tu lado.
Y después de escucharme
sorprendida me dice que no sabía
que una estrella se le había caído.
Me rei de su ocurrencia
pero pensé en la luz de tu mirada
pensé en la luz de tu sonrisa.
Y descubrí que tenía razón
había encontrado mi estrella
que hoy ilumina mi vida.
